¿Cuántas cosas sabes del cruasán?

Datos que no conocías sobre este rey de la bollería en el día en el que se le rinde homenaje

Es, con permiso del Donut, el auténtico rey de la bollería. Algo a lo que pocos podemos resistirnos. Hablamos del croissant, o correctamente dicho en la lengua de Cervantes, el cruasán, al que habremos hincado el diente un sinfín de veces pero del que, probablemente, pocos datos conozcamos; poco importa cuando el placer no es conocerlo, si no degustarlo. ¿Verdad?

 

Hoy, sin embargo, y coincidiendo con el día en el que se conmemora a este dulce presente en casi todas las culturas gastronómicas, vamos a cultivar tu mente con un par de datos relacionados con los cruasanes. Comenzando por la pregunta más obvia: ¿de dónde son originarios los cruasanes? “De Francia, de ahí su nombre, croissant”. Pues, ¡error! En realidad nacieron en Viena, si bien al país galo sí es cierto que le debemos el hecho de haber sido uno de los impulsores del éxito del clásico hojaldrado; se dice, de hecho, y con frecuencia, que es el mejor sitio en el que podemos disfrutar de un cruasán.

 

Sea como fuere, el dulce nació en la capital austríaca en el siglo XVII y como símbolo de conmemoración de una victoria del ejército vienés. Veamos: cuenta la tradición que en el año 1638, cuando los turcos intentaban sitiar la ciudad, fueron los panaderos quienes, al trabajar por la noche, oyeron cómo los enemigos cavaban un túnel para entrar a la urbe. Tras dar señal de alarma, se quiso reconocer la ayuda de los panaderos encargando unos panecillos con la forma del emblema de los turcos (la media luna) como símbolo de la victoria.

 

Cabe volver de nuevo a Francia, no obstante, pues se estima responsable de su introducción en el país galo a la mismísima Maria Antonieta, esposa del rey de Francia, de quien se dice era una amante de estos pasteles.

 

Ya sabes un dato más sobre estos deliciosos hojaldrados, ¡nunca se sabe cuándo caerá la pregunta en el Trivial! Pero mientras, ¿y si lo celebramos merendando cruasanes? En Geland los ofrecemos para hostelería de todas las clases: mini, con cuernos, sin, de mantequilla, rellenos, cubiertos, de chocolate, salados… ¡Y hasta Instant! Los más rápidos de Geland y también los más cómodos. ¡Pregúntanos! Estaremos encantados de asesorarte y recomendarte nuestros productos de bollería para hostelería.